En estos últimos años, con pesar he notado, que docentes y directivos, poco o nada hacen respecto de los casos de violencia en las escuelas.
Con preocupación escuchaba en los primeros meses de este año aun niño, que contaba cómo un par suyo, cansado de ser objeto de burlas.llevó un cuchillo a la escuela,pero por suerte ésto fue alertado por compañeros del niño de 9 años y su maestra.Aunque intervinieron equipo pedagógico y su maestra, no hubo una charla con todo el grado y esto quedó bajo la alfombra.
Es frecuente ver como padres de niños ingresan a las aulas y amenazan a otros niños, ante la mirada del docente,que no se arteve a pedir al adulto que se retire.
Hasta es común ver, como en casos puntuales,adultos zamarrean a niños, mientras directivos nada hacen.
Me atrevo a preguntar: ¿no somos cómplices, por no afrontar situaciones,que suceden ante nuestros ojos?
CFM
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