Existe
el falso mito de que murciélago es la única palabra en castellano que
contiene todas las vocales, pero seguro que todos recordamos aquel
famoso mensaje del lector José Fernando Blanco Sánchez en las cartas al
director de ABC, en el que comentaba:
Acabo
de ver en la televisión estatal a Lucía Echevarría diciendo que
,”murciélago” es la única palabra en el idioma español que contenía las
cinco vocales.
Mi estimada señora, piense un poco y controle su “euforia“. Un “arquitecto“, “escuálido“, llamado “Aurelio ” o “Eulalio“, dice que lo más “auténtico” es tener un “abuelito” que lleve un traje “reticulado” y siga el “arquetipo” de aquel viejo “reumático” y “repudiado“,
que “consiguiera” en su tiempo, ser “esquilado” por un “comunicante“,
que cometía “adulterio” con una “encubridora” cerca del “estanquillo“,
sin usar “estimulador“.
Señora escritora, si el “peliagudo” “enunciado” de la “ecuación” la deja “irresoluta“, olvide su “menstruación” y piense de modo “jerárquico“. No se atragante con esta “perturbación“, que no va con su “milonguera” y “meticulosa” “educación“. Y repita conmigo, como diría Cantinflas: ¡Lo que es la falta de ignorancia!
Por
tanto, la riqueza del castellano es tal que existen bastantes palabras
con las cinco vocales. ¿Pero hay alguna que las tenga por partida doble?
La respuesta es afirmativa y si no, que se lo pregunten al único
vocablo que puede presumir de ello: guineoecuatorial.
Luego
están aquellos que portan cuatro consonantes seguidas, como
transplantar, substraer, abstraer o abstracto o aquellos otros, que no
sin gracia, son capaces de tener la "í" repetida cinco veces, como
dificilísimo o disciplinadísimo.
Terminamos
con ese término con nombre de animal, palíndromo, que no es más que una
palabra, número o frase que se lee igual hacia adelante que hacia
atrás. (en caso de ser un número, se llama capicúa). Entre lo más
palíndromos más largos encontramos sonsáñasnos (11), somarramos (10) o
reconocer (9). Si con tanta letra te ha entrado miedo a pronunciar las
palabras, quizá tengas un principio de hipopotomonstrosesquipedaliofobia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario